Marta Lamas: el feminismo mexicano vive su triángulo de oro

El movimiento feminista en México atraviesa una etapa sin precedentes, impulsado por la fuerza de las calles, el pensamiento crítico y la presencia de mujeres en el poder.

🦋 Redacción de las Ciudadanas

Hace unos días, la antropóloga y feminista Marta Lamas visitó la mítica Casa de América, en Madrid, donde compartió reflexiones profundas sobre el momento histórico que atraviesa el feminismo en su país natal, a través de la conferencia: “El feminismo hoy en México: conquistas y desafíos”. 

Las crónicas posteriores dejan la siguiente certeza: el movimiento feminista mexicano está en una etapa única. “Estamos viviendo el triángulo de oro: la movilización en las calles, la academia y las funcionarias feministas en el poder”, afirmó con convicción.

Para Lamas, este cruce de fuerzas representa una oportunidad transformadora para avanzar en derechos, políticas públicas y conciencia social, que se expande con las acciones y simbolismo del  gobierno de Claudia Sheinbaum, primera presidenta mexicana, quien ha impulsado políticas de igualdad y ha puesto sobre la mesa el reto de construir un Sistema Nacional de Cuidados como eje de transformación social.

“La presidenta ha planteado que es tiempo de mujeres. No se trata de excluir, sino de cerrar la brecha de desigualdad”, Marta Lamas.

La antropóloga también abordó los desafíos que enfrenta el feminismo frente al auge del discurso contra la llamada “ideología de género”, una narrativa que, según ella, tiene raíces en el Vaticano desde 1975 y ha sido retomada por gobiernos conservadores como los de Trump, Meloni o Bukele. “En México, por fortuna, la perspectiva de género sigue siendo entendida”, afirmó.

Sobre la participación masculina en el feminismo, Lamas fue clara: “El feminismo busca transformar la sociedad, y la mitad de la sociedad son hombres”. Reconoció que cada vez más hombres se suman con mirada feminista, aunque advirtió sobre los riesgos de movimientos misóginos juveniles como la manosfera o los incels.

Respecto al debate sobre las mujeres trans, defendió la necesidad de un diálogo informado y respetuoso:  “Somos seres bio-psico-sociales; no se puede reducir la identidad al cuerpo o al útero. Hay que comprender también el inconsciente y la dimensión psíquica”.

Uno de los puntos más interesantes fue la reivindicación de la antropóloga mexicana del  papel del arte y el humor como herramientas políticas: “Hay que divertirse, reírse de una misma; la alegría también es una forma de resistencia política”.

Desde Ciudadanía Fémina, abrazamos estas palabras como luz y poder. Porque el feminismo no sólo transforma estructuras: también transforma miradas, vínculos y futuros.

Con datos de Casa América.